[Hay una joven que va caminando por ahí con un vestido en tonos beige y cafés muy sencillo, el cabello cubierto con una pañoleta.
Si la ven, se pueden dividir en dos sus reacciones. Los que tengan algo de control mental van a sentir el impulso de redoblar sus paredes mentales porque hay *algo* en la joven que atrae su atención.
Para los otros, esa misma atracción hace que quieran acercarse a ella, algunos llenos de amor, otros llenos de odio. Para estos segundos, también, en cuánto piensen en acercarse, tan rápido como lo hagan, pensarán que más bien quieren alejarse y no prestarle más atención a la mujer]