[Trata de que la voz no le tiemble, pero Bobby, Bobby. Haberlo visto y no haber podido hacer nada una sola vez ya había sido suficiente.] Eso es, amor. Eso es. Sólo mírame. Sólo--
[Pero entonces se escucha el primer golpe a sus espaldas, puño contra hueso. El primer grito de Dean, un jadeo. Otro golpe, y ahora un grito. Y otro. Y otro. Y él no puede evitar hacer un gesto de dolor cada vez, ni que la voz se le rompa cuando vuelve a hablar.]