¿Morir-- [No, no te está entendiendo. Debes sentirte demasiado mal como para decir esas cosas.] Hasta donde sé, no me he muerto. Pensé en ello como una salida a la desesperación, pero entonces caí en cuenta que no quería que tú me mataras. [Presiona sus dedos un poco en tu mejilla para demostrar que está sano y salvo.]