Más importante que eso... Irisviel. En esta época -mi época- no hay un contrato amarrándome a ti. Sin embargo, si se me es permitido, quisiera poner mi espada a tu servicio, mientras soy libre de darla.
Tienes formidables camaradas aquí, sin duda. Aún así, mi protección es tuya, para cuando sea necesitada.