Las vidas se acaban. Aunque su alma vuelva a reencarnar bajo forma humana, no importa qué tan parecido al que recuerdes pueda llegar a ser, su existencia será una aparte. Sus recuerdos serán otros, la gente rodeándola también.
La persona que persigues ha muerto. No importa cuánto te hagas esperar, eso no cambiará.