[La escena no debería parecerle tan encantadora. ¿Qué te habrá pasado en el camino para terminar convertido en el Reiji-san que ella conoce?] Los animales en sí son realmente encantadores. [Ríe bajito al ver como los conejitos te piden amor.] De eso estoy tan segura así como de que ellos parecen tenerte mucha estima, Reiji-kun.