[No tienes nada que temer de él. Aunque quizás de pronto puedas sentir que la temperatura cae a tu alrededor, y algo frío y suave cae sobre tu rostro.]
Ábrelos.
[Cuando lo hagas, verás que ya no están bajo un árbol, y que tus libros han desaparecido, y el lago-mar no se ve por ninguna parte. Y, más que eso, notarás que están de pronto en medio de un bosque de coníferas en lo alto de unas montañas. Cae nieve suavemente, y en el horizonte, donde las nubes se abren, puede verse el sol ocultándose, haciendo que todo se vea ligeramente rojizo.]