¡Lo es! Es el centro espiritual del planeta, pero está oculto al mundo exterior por su protección así que casi nadie sabe de él. Se encuentra en la cordillera más alta, en los Himalayas en Asia del sur. Como civilización, no les preocupa mucho cosas como el poder político o económico, sino el honor, la iluminación del espíritu y el temple del cuerpo. No es un lugar perfecto, pero se respira una gran paz.