Escucha. Los dioses no somos sólo arquetipo. Los dioses no tenemos historia, somos historias. Podemos ser reescritos en diferentes formas, infinitas veces, siempre y cuando el nombre y parte de la personalidad persista.
¿Yo? Soy un personaje de comic, plasmado en tintas y píxeles digitales. ¿Soy una versión del dios nórdico? Sí, también, pero mi naturaleza no se limita a tal y no hago lo mismo que mis mitos o mi yo anterior. Soy un retcon de otro personaje de comic más antiguo del mismo nombre, de la misma editorial. Sólo dos escritores me han escrito, al contrario de mi vida pasada que ha tenido docenas. Él sabía muy bien cuando murió que sería resucitado como otro Loki. Y al final de mi historia, también seré escrito por otro o retconeado, y para que otro Loki que no es ni yo ni el anterior exactamente sea el usado en otro tipo de historias. Oh, estamos siempre muy conscientes de lo efímero de nuestro storytelling, de esas cadenas del status quo que no aprisionan a los Lokis que no son de nuestro universo.