[Mueve su mejilla para recostarla contra el costado de tu cabeza, soltando una risa corta con un poco de amargura, pero llena de alivio y felicidad.] [Va a disculparse primero pero siente que ya pasó el tiempo de las disculpas, que ahora debe hacer las cosas bien.] Yo también lo hice, Dean, no dudes de ello.