[Suspira un poco hastiado.] Eso es comprensible, por supuesto. Pero como dije antes, es tú elección. Sea como sea, de todas maneras nos veremos obligados a permanecer aquí hasta que tú hables sobre lo que debes hablar, y yo escuche lo que debo escuchar. Sólo consideré prudente exponerte una opción existente, y que podría resultar útil para facilitarte el proceso.