[La montaña tiembla con los estertores de Chernobog, su rugido cuando disparas a sus ojos ensordecedor y espeluznante. No son los únicos que están combatiéndolo, ni mucho menos, y el grupo que se ha congregado en torno al monstruo aprovecha para rematarlo, pero el que ha dado el tiro de gracia - perdonando el juego de palabras - has sido tú con las balas especiales. La erupción volcánica empeora a medida que Chernobog va hundiéndose dentro del cráter del volcán, manotea salpicando lava, rocas y cenizas a todas partes.]