Estas en una tierra donde la muerte y la vida no tienen gran diferencia entre sí y dónde ofender o lastimar a alguien que se la ha dado una nueva oportunidad te puede costar muy caro.
Además, dudo que al Señor le agrade que vayas atormentando a almas puras e inocentes al recordarles que lo que viven en este mundo no es más que una oportunidad que puede volverse una fantasía de un momento a otro.