Okay, Ivs, podemos hacer esto de dos maneras: Una, los dos vamos como los adolescente que somos y pasamos un buen rato y yo juro sobre la Biblia no decirle a nadie que de hecho te divertiste un rato. O dos, te sigo a donde sea que quieras ir con cara de perro pateado cantando la de Un elefante hasta que se me acaben los números.