[Es bastante obvio que no quiere cruzar su mirada con la tuya, aunque le cuesta dada la posición.]
¿Por qué te empeñas tanto conmigo? ¿Por qué te esfuerzas para que demuestre algo que no quiero? Porque sé que si lo hago no podré dar marcha atrás y... [Y tiene miedo. Miedo de no poder armar nunca más su barrera, miedo de volverse frágil y de demostrar lo mucho que le afecta todo lo que te pasa. Miedo a que todos sepan cómo se siente.
Respira profundamente, intentando calmarse.] Estoy bien así, Shibuya. Siempre lo he estado.