Ninguna situación que requiera la presencia inmediata de Uno. El Señor Lucifer podrá disponer y usar a Uno cuando lo desee; pero mientras, la princesa es quien ha llamado.
[Le da unos golpecitos con el mismo dedo índice a Kurai en los labios, suave.] Por supuesto. Sólo si su majestad está dispuesta a darle a este pobre, solitario bufón algo a cambio.