Ah, pero ambos continúan siendo adorables; tu corazón lució hermoso entre mis manos y si es la falta de un cuerpo lo que te agobia, crearé uno para ti, y volverás a estar entera.
Sí. He de decir que mi único dolor nace de no poder sostenerte ahora-- tu consideración hacia mi tedio me hace insostenible el no poder tomar tus manos.