[Ríe entre nervioso e irónico.] Mi historia no es así... No es tan triste como la suya pero... De donde vengo no importa que edad tengas, puedes ser enjuiciado como adulto por un crimen que no cometiste... jamás podrías matar a todos tus compañeros de clase y por si fuera poco te llevan a una prisión donde la jefa de guardias ataca y hiere a cualquiera... donde existimos personas con un poder extraño que nos permite manejar la sangre a voluntad como un arma y nos hacen participar en duelos a muerte, si mueres o pierdes te quitan alguna parte de tu cuerpo para estudiarla y comprender por que somos así.