[La reina nunca supo la diferencia, y se hizo un amuleto con el cabello que pensó era de Blanca Nieves. Blanca Nieves, mientras, huyó dentro del bosque y corrió y corrió hasta que llegó a una cabaña en el bosque.
La caballa estaba llena de cosas pequeñas, hechas como para niños. Había siete sillas y siete camas y siete platos alrededor, pero ninguna persona. Como Blanca Nieves estaba cansada, se quedó dormida en las camas.
Mientras, no muy lejos de ahí, los dueños de la cabaña, los siete enanos, estaban terminando su día de trabajo.]