Capitán Jack Harkness (capnhoharkness) wrote in mansion_ooc, @ 2008-04-16 15:28:00 |
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My heart will go on and on.
Celebrando el regreso triunfal de IJ, Ioryogi/Jack fic con la escena aquella de la película Titanic.
Oh, y digamos que sucede en un universo alterno donde a nadie le parece raro ver a un plushie por ahí hablando y caminando. \o\
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Cuando se encontraron en la cubierta del barco, uno con una piña colada en la mano y el otro con una maletita, no supieron si achacarlo al destino o a que los controlaban aún después de haber abandonado la maldita casa. El punto era que ninguno de los dos se veía muy feliz; sin duda hubieran preferido encontrarse en el muelle para ambos darse simultáneamente la media vuelta y no abordar, porque el crucero duraba un mes y bastante se habían soportado ya. Pero ahora no quedaban muchas opciones y a ninguno de los dos les hacía gracia la idea de tirarse al océano.
-Adiós a mis vacaciones -dijo Jack tras un largo suspiro, frunciendo el ceño.
-¿Y qué hay de las mías? -gruñó Ioryogi.
Jack terminó su bebida de un trago antes de decir:
-Supongo que siempre podemos ignorarnos; el barco es muy grande.
-Creo... que para mi hígado sería lo mejor.
Y tomaron cada uno por su lado.
Y genuinamente intentaron ignorarse, de veras que sí, pero era difícil hacerlo con Jack invitado a cantar con la banda prácticamente cada noche. O con Jack besuqueando a marineros y pasajeros por igual en los más inesperados rincones. (¡No! ¡Plushie no lo buscaba! ¡El muy pervertido siempre salía de la nada!)
Después de una semana de esto, Ioryogi trató de volver al zen tomando alguno de los talleres de arte. Entró al de dibujo. Descubrió que no lo hacía tan mal (tan mal como Kobato, es decir) y con las técnicas mostradas por la maestra (una mujer mayor muy simpática y paciente que encima encontraba lindo al peluche) mejoró exponencialmente. Por supuesto, junto con sus habilidades, también aumentó la paz interior porque ahora practicaba en lugar de pasar el tiempo buscando a Jack topándose por ahí con el degenerado.
Sin embargo, la felicidad es eterna y, sobre la tercera semana, para uno de los ejercicios, sugirió a sus aumnos que trabajaran un desnudo.
Ioryogi palideció tanto como puede palidecer un peluche.
-P-pero ¿un desnudo cómo? ¡Si no soy un pervertido como el capitán Jack!
-¿Conoces al capitán Jack, lindura?-dijo la profesora, quien procedió a reír como colegiala -. ¿Por qué no le pides que sea tu modelo? Dudo que diga que no. Lo haría yo, pero... -otra risita.
-Bwuuuuuuuuuuuuuuuuuh...
Entonces, Ioryogi escuchó voces detrás de él, varias voces, y todo lo que decían podía ser resumido de esta manera: "Si tú no se lo pides, lo haré yo."
El peluche se dio cuenta de que se encontraba ante una difícil elección, pero a la vez sentía que era su deber evitar dentro de lo posible que otras personas sufrieran una experiencia tan traumática.
Ay, ¿por qué era tan bueno?
Media hora más tarde, Plushie buscó a Jack para explicarle la situación, dejando bien claro que era para una tarea.
Jack aceptó con rapidez y, aunque tuvo la decencia de no reir, la sonrisita del muy bastardo hacía obvio lo que pensaba. Ioryogi tuvo que contenerse para no morderle el trasero en especial porque dadas las circunstancias, daría a pie a muchos malentendidos.
-Desnudo artístico, ¿dices?-preguntó Jack.
-No quisiera, pero sí.
-¿Preferirías un desnudo pornográfico?
-¡SILENCIO! ¡A LOS MODELOS NOS LES PAGAN POR HABLAR!
-No me estás pagando.
-¡CÁLLATE Y TERMINA DE SACARTE LOS CALZONES!
-He tenido novios urgidos, pero tú...
-QUE. TE. CALLES.
Finalmente, Ioryogi logró dibujar esto.
-No está tan mal -dijo Jack.
-Si le cuentas alguien, te mato -dijo el peluche azul.
-Y de mucho te va a servir.
-Cállate. Y hazme el favor de vestirte de una jodida vez para que te largues.
-También he tenido novios así...
-Te. Odio.