Se quedó en silencio un buen rato como esperando que Jéremie riera, o le dijera que es broma, que ni loco compartiría su chocolate, porque es un hecho, NUNCA lo hace.
-¿...Hablas en serio? ¿TU chocolate? - Jér asintió y Antoine se paró de su sitio dejando caer el libro que leía - ¿Y me he perdido de ...? - Luego recapacitó y recogió el libro, para luego ponerlo en el asiento de la butaca - ¿...de todo eso? ¿Y Clem es la que se autoproclama madrina de tu boda?-