[Los ladridos de Bessie lo despertaron a tiempo para alcanzar a levantarse, y a pasar medianamente a salvo lo más terrible del terremoto. Lo malo fue que una repisa cayó sobre la pata de la perra, así que ahora está saliendo de su casa con ella en brazos, con la intención de buscar a su gente, y si puede ayudar a alguien en el camino, mejor.] Está bien, bess, tranquila.