[Hey, ¿ven a alguno de esos chicos? ¿Recuerdan esas caras agotadas? Si no, da igual. Si es así, seguro que se darán cuenta que no las han visto en todo el verano. De hecho, ellos mismos están bastante frustrados de haberse perdido la diversión. Pero ay, estaban en una misión en una de esas cuevas con bendeo del espacio-tiempo y lo que parecía una quest de un par de días fue afuera una aventura de un par de meses. Shit happens.
¿Le hablas a alguno de ellos? Están:
1) El pequeño de los ojos verdes y cabello negro, que saca de paseo a un pequeño perro corgi. Con la mano que no sostiene la correa, está sosteniendo su celular. Seguramente sube fotos de la odisea a Instagram o se está poniendo al día con Tumblr, quién sabe.
2) El joven moreno de sonrisa traviesa de duende, que carga un tubo largo como el que usan los arquitectos e ingenieros para llevar planos. Quiere comer algo que no sea una hamburguesa hecha por él, luego de la quest.
3) Lejos de la escuela, el adorable chico de los enormes ojos azules, que también está muy hambriento y está gastando todo su loot del dungeoneo en medio menú de un restaurante. Sobre la mesa hay una bonita baraja de Tarot sin estrenar.
4) Un sereno muchacho rubio que examina las páginas de un misterioso libro dorado que brilla y está en chino. Ni siquiera es de su dimensión, pero es una fuente de sabiduría. Por cierto, tal vez él 4.1) Lleva puesta una máscara-bandana cosa en su cara y un uniforme de superhéroe 4.2) De qué hablas arriba? Es un adolescente hippie normal, exceptuando por el libro raro
¿Perrito, planos, cartas, libro? Elije tu veneno. O más de uno.]