[Pone una mano en tu pecho] Cuando te conocí, no sabía lo que era amar, había olvidado lo que era tener cariño por alguien. Tú despertaste en mí todas las emociones que estaban dormidas en mi interior, por eso te agradezco. Por salvarme del mundo en que vivía, por salvarme de mí, por dejarme amarte y elegirme para pasar tu vida conmigo.